domingo, 25 de noviembre de 2012

Finales.

Qué decir, cuando estás así. No saber por dónde empezar para agradecerle a alguien las cosas.
Que han sido los mejores cuatro meses de mi vida, me ha sabido a poco pero te sigo queriendo con locura. Sigo enamorada de ti, sigo sin admitir que ya se acabó, sigo pensando que es un mal sueño y que mañana despertaré y habrá pasado todo. Pero no, no es así, porque ya dormí ayer y me desperté hoy, y seguía siendo un infierno.
Porque es lo mejor para los dos, pero estar sin ti es... No hay palabras, para explicar lo horroroso que es, pensar en tu sonrisa, en tus besos, en tus cosquillas, en el aroma de tu piel, y asumir que ya no eres mío, que ya no soy tuya. Que ya no estás conmigo. Y es una sensación terrible, verte por la calle hace que se me parta el alma, que sea inevitable derramar lágrimas, y hoy mismo te he dicho "Nadie merece las lágrimas de otra persona" para que no llorases más por mí, pero es algo inevitable, lo sé, no puedo dejar de llorar, no puedo sonreír al recordarte porque empezaré a llorar.
Te echo de menos, de voy a echar de menos como a mi vida, ya que, durante este tiempo tú lo has sido, como me dijiste también ayer. Que te debo mucho, debo agradecerte todo lo que has hecho por mí en este tiempo, todas las sonrisas que me has sacado y las depresiones que me has quitado. Que has sido lo más sincero que hayas podido ser, porque sé que te costaba contarme la verdad. Pero el pasado da igual. Me arrepiento de no haberte insistido más. Pero ya es tarde. No importa, y no habría importado en ese momento. Da igual.
Que quede claro, que te quiero, que aún sigo enamorada de ti, que va a costar dejar ese sentimiento atrás, soy fuerte, pero incluso las personas más fuertes acaban siendo débiles en algún momento.
Ya me he tragado mi dignidad y orgullo, me da igual llorar y decir que he llorado, llorar en público, pedir un abrazo. Me da igual todo por ti. Y me trago mi orgullo al decir que me estoy arrepintiendo, que cada segundo que pasa se me hace mas difícil estar sin ti. Pero ya está hecho.
Espero que todo te vaya genial, mejor que a mí por lo menos, muchas gracias por todo.
Pablo Campillo Espejo.

martes, 20 de noviembre de 2012

Errores.

A veces cometemos errores sin sentido, decimos cosas de las que después nos arrepentimos, tomamos decisiones estúpidas, estropeamos aquello que podría ser algo apasionante.

¿Qué somos?

Recuerdo cuando decía 'Vamos a jugar a papás y a mamás. ME PIDO SER MAMÁ. Esta será la cocina, este el dormitorio... Corre papá, ve a comprar comida que los niños tienen hambre...'

Recuerdo cuando la palabra 'rallarse' no significaba nada para mí, y ahora me rallo por un chico.
Recuerdo cuando veía a la gente fumando por la calle y decía 'Yo nunca voy a hacer eso.'
Recuerdo cuando con un caramelo, el día entero se me arreglaba.
Recuerdo cuando ahorraba para comprar chucherías, y tenía billetes por todos sitios... Ahora no consigo ni ahorrar 10€ , y no ahorro para comprar chucherías... si no para comprar tabaco.
Recuerdo cuando me tiraba por columpios, me subía en los ponis en la feria.
Recuerdo que cuando aprendí a leer, leía todos los carteles de la calle.
Recuerdo que no me daba vergüenza nada, corría por las calles con mucha felicidad, gritaba tonterías, me quería comer el mundo. Ahora, si hay alguien digo: 'No lo hago, que hay gente. Qué lache.'
Y ahora me siento aquí, mirando como niños de 6 años hacen lo mismo que yo hacía, corren por el parque... Me miran con la misma cara con la que yo miraba a la gente que fumaba. 
Sí. Me gustaría volver a ser así, sólo por un día.
Pero mírame ahora... ¿ En qué me he convertido ?